La operación Mikel Merino o la de cualquier otro mediocentro ha sufrido un frenazo casi en seco a la espera de otros movimientos. El Barça se está centrado en el fichaje de Nico Williams, que es su absoluta prioridad, y si no, todos los esfuerzos económicos estarán destinados a la contratación de Dani Olmo, que aguarda en un segundo plano.
Reforzar el mediocentro es un objetivo que el Barça tiene en la agenda desde años antes de la marcha de Sergio Busquets, pero no da con la fórmula. Esta temporada, la prioridad es Nico Williams y el Barça no se mueve de ahí. Todo está supeditado a ello.
El jugador, según ha podido saber MD, está a la expectativa de que el Barça logre traspasar a algún jugador que pueda acercarle al Camp Nou. Pero con el discurrir del tiempo llega el desencanto.
Al Mikel Merino le queda un año más de contrato y si nada ocurre, estará el 5 de agosto en la vuelta al trabajo con la Real Sociedad. El Arsenal es la otra alternativa pero el club donostiarra no ha recibido oferta aún por él, aunque una vez contratado el central Calafiori, irán a por un centrocampista. Todavía no ha hecho una oferta y se especula con Fabián Ruiz, del PSG. Quedaría la vía alemana, pero no hay novedades.