Una de las cuestiones que más horas de sueño quitarán a los aficionados del Atlético de Madrid tendrá que ver con uno de los fichajes más ilusionantes de los últimos años y el destino que pueda tener. Hablamos de Samu Omorodion, el joven delantero de apenas 20 años de edad que pasa por ser el futuro de la selección española.
Sus cualidades, su poderío físico, su potencia, su juventud, su personsalidad… son ingredientes que hacen pensar a todos que estamos ante uno de los grandes hallazgos de los últimos años. Por supuesto que le quedan cosas por pulir, como su tranquilidad a la hora de definir de cara a portería, pero por lo demás tiene todas las cualidades para ser un delantero muy grande.
Por eso no extraña que en Europa se hayan vuelto literalmente locos con el jugador melillense. Especialmente en el caso de Chelsea y Nápoles. El cuadro italiano llegó a presentar una propuesta en torno a los 35 millones de euros que fue rechazada. Y el equipo inglés también se encontró con una respuesta parecida en su intentona.
Sin embargo, desde Inglaterra señalan que el equipo londinense no ha tirado al toalla aún en este asunto. El Atlético de Madrid tiene claro que no se vende, que su cláusula supera los 100 millones de euros y que es el futuro del club, pero la realidad es que las propuestas están siendo tentadoras y están subiendo en cuantía. Algo que, como poco, viendo las necesidades económicas de la entidad del Metropolitano, inquieta a los aficionados.
El Chelsea planea presentar una nueva oferta por el delantero después de que el equipo español rechazara una propuesta inicial. Los Blues inicialmente lo intentaron con una cantidad en torno a los 40 millones de euros, de los que cerca de 30 serían en adelantado y el resto por bonus.
El delantero hispano-nigeriano anotó ocho goles en 35 partidos durante la campaña 23/24 antes de unirse al Atlético por sólo seis millones de euros procedente del Granada. Omorodion no se convertirá en agente libre hasta dentro de cuatro años, lo que significa que el Atlético no está bajo presión para vender al joven, que también está en el radar de otros clubs de la Premier como el West Ham United.